Lletra menuda. Los candados de Antoni Pastor

LLORENÇ RIERA

No ha habido sorpresa. En el juego de plazos calculados, actuaciones
coincidentes y decisiones de entretenimientos, las huellas marcadas
dejan claro que los senderos de Antoni Pastor y Peter Eisenmann
conducen, en el caso de es Fangar, al mismo camino. No se puede pisar
en una dirección y señalar la ruta contraria. Sabíamos, por hechos
consolidados, que todo estaba formalmente engrasado, en lo
administrativo y lo político, para que ayer mismo se volvieran a
instalar sin problema alguno los candados en las barreras de es
Fangar.
El alcalde siempre ha interpretado los hechos y las resoluciones a
favor de la propiedad antes que conceder por lo menos el beneficio de
la duda al interés y al servicio público. No se ha desviado un ápice
de su ruta en las declaraciones que figuran en esta misma página. No
molesten a es Fangar, que Manacor tiene otras cosas mucho más
importantes por hacer y esto son minucias caprichosas de cuatro
excursionistas tozudos y desocupados y, además, la propuesta de la
propiedad es buena, ha venido a decir Antoni Pastor. Entonces ¿por qué
el mismo no resuelve de una vez por todas, en un abrir y cerrar de
ojos, la cuestión insignificante de es Fangar y se ocupa de los
grandes asuntos de un municipio huérfano de de definición
institucional y sin caminos de futuro? Pastor tiene razón cuando
admite que tiene puesto el candado a las rutas que deben definir el
porvenir de su urbe, pero esto tampoco es excusa para que ensaye
malabarismos con los candados de es Fangar. Las piezas ya le han caído
al suelo y hemos visto el contenido de sus cartas.
Más de mil personas dieron vida el domingo de forma natural, serena y
alegre a los caminos que condujeron antaño hacia el sustento de la
payesía de Son Macià. No paso nada, no hubo problema alguno. ¿Por qué
condenar otra vez a la inmensa finca a la clausura del candado con
llave de mentalidad alemana?
Mientras es Fangar se abonaba el domingo con vida colectiva y cívica,
el PP celebraba a dos pasos una comida con significativos cargos y
etiquetada como de compañerismo colectivo en la que se declaró el
apoyo incondicional a la familia Sureda, con edil en Manacor y
directora general en Palma y con claros intereses conectados a los
caminos de es Fangar. Es otra clara evidencia de como maneja los
candados este partido. A cerrajazo limpio. Nada de mantener la
neutralidad para discernir entre lo público y lo privado. Aquí no hay
más delimitación que la marcada por la valla de nuestro propio corral.
Es Fangar es un grave problema físico pero también un recinto
desvelador de comportamientos y actitudes clave.




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Plataforma Pro Camins Públics i Oberts
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Tel 685 247 362

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