Lenguas indígenas y normalización: El caso europeo.
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César Jara Luna [Perú, quechua]
[EMAIL PROTECTED] 
Universidad Pompeu Fabra
Barcelona, [Cataluña], España, [Unión Europea]

La mayoría de los países de América Latina comparten la realidad de ser
estados multiculturales, plurinacionales, plurilingües y multiétnicos. En
este sentido, el panorama lingüístico y étnico en Latinoamérica constituye
un mosaico de diversidad lingüística.

Socialmente, en muchos estados, las minorías étnicas son verdaderas mayorías
(Bolivia, Perú, Ecuador, Paraguay, México). Estas sociedades son hablantes
de lenguas originarias como el quechua, aimara, guaraní, nahualt.
Políticamente, estas mayorías minorizadas empiezan a emerger como
movimientos indígenas de carácter reivindicativo. Y al parecer las
izquierdas han hallado su mejor caldo de cultivo en este fenómeno, aunque
con matices nacionalistas.

La relación densidad lingüística por cada estado y extinción de lenguas
guardan relación negativa. Muchas lenguas, al tiempo que son descubiertas
son declaradas en inminente peligro de extinción. Por su parte, los estados
poco o nada hacen por su patrimonio cultural y lingüístico. La escuela no ha
trabajado en favor de las lenguas indígenas. Aunque conviene señalar que en
17 países de Latino América  se vienen dando  programas de Educación
Intercultural Bilingüe (EIB). Sin embargo, en la práctica no pasan de ser
modelos asimilacionistas.

La EIB actual se basa en el enfoque de relativismo cultural, y como tal,
siempre termina favoreciendo a la lengua y cultura mayoritaria: el
castellano. Aunque muchos pedagogos consideran que este modelo pedagógico ha
contribuido a la pedagogía universal. Sin embargo, los resultados parecen no
ser tan alentadores, porque su práctica lleva a inclinar la balanza hacia la
castellanización moderada. Es decir, favorece a la cultura y lengua
dominante. Los pedagogos y especialistas tienen que plantearse una revisión
urgente, necesaria y profunda sobre esta práctica pedagógica. Lo ideal sería
diversificar modelos educativos para poblaciones multilingües,
pluriculturales, multiétnicos y multinacionales.

En el tratamiento de lenguas en la escuela se debe empezar a implementar un
enfoque de discriminación positiva de la lengua y cultura dominante a favor
de las menos favorecidas: la lengua indígena local. Puesto que para
revitalizar una lengua socialmente desprestigiada es necesario concederle
mayor número de tiempo en las actividades curriculares de la escuela, así
como brindarle mayores espacios de uso dentro de la sociedad. 

Las experiencias en normalización de lenguas históricamente minorizadas en
Europa podrían alumbrarnos el camino. Lenguas como el catalán, el euskera
(España) y el neerlandés (Bélgica) han pasado de ser lenguas desprestigiadas
y orales en el pasado a ser lenguas con supremacía económica y cultural en
la actualidad. Estas lenguas han logrado posicionarse en un estado de uso
normal. Además compiten dentro de sus regiones con el castellano y francés,
respectivamente. Por otro lado, la cara opuesta de la moneda nos lo muestran
el gallego (España),  bretón (Francia) y galés (Inglaterra). Dichas lenguas
no han podido tener mucho éxito en este propósito.

El primer grupo de lenguas europeas citadas son en la actualidad lenguas
emergentes. Si revisamos su proceso histórico hallamos que en el pasado
estuvieron en condiciones en las que hoy se hallan las lenguas indígenas en
América Latina. Así podemos tipificar que las sociedades de estas lenguas
fueron:
1. Minorizadas históricamente a través de conquistas y ocupaciones.
2. Poblaciones rurales: pobres, analfabetos y campesinos.
3. Lengua estigmatizada: de uso doméstico, oral e informal.
4. Lenguas cuya normalización se remonta a los últimos 40 y 60 años.
5. Lenguas cuyo proceso de normalización ha tomado fuerza los últimos 30
años.

Escudriñando el proceso de normalización de estas lenguas se halla que
abarcaron todas las esferas y niveles sociales. La normalización se ha
planteado desde un sentido de interrelación holística. Abarca aspecto como:
1. Cultural: afirmación cultural del grupo.
2. Lingüístico: desarrollo de la lengua.
3. Educativo: vehiculización de la lengua.
4. Social: participación ciudadana en el desarrollo de la lengua
(voluntariado lingüístico).
5. Político: empleo de la lengua en las campañas políticas y debates.
6. Económico: empresas y personas generan ganancias económicas empleando la
lengua en la venta de sus productos y la prestación de sus servicios.

Las lenguas europeas emergentes han logrado consolidarse a través de
interrelacionar la normalización en los diferentes niveles de la actividad
social. De lenguas minorizadas han pasado a tener supremacía
socio-económico-cultural dentro de sus estados. En la actualidad son:
1. Lengua co-oficial en sus territorios.
2. Lengua instrumento de la educación.
3. Lengua de los medios de comunicación.
4. Lengua de la ciencia y la tecnología.
5. Lengua de la administración del poder ejecutivo, legislativo y judicial.
6. Lengua con supremacía económica y cultural dentro de sus estados.

La instrumentalización en la educación abarca desde los niveles más básicos
hasta los niveles académicos de postgrados. También son lenguas
instrumentales en los  medios de comunicación masiva:
1. Lengua usada por la prensa oral (radio)
2. Lengua usada por la prensa audiovisual (Televisión)
3. Lengua usada en la prensa escrita (Periódicos, revistas, etc.)
4. Lengua usada en el cine (doblajes)
Al mismo tiempo se han convertido en la lengua vehículo de la ciencia y la
tecnología:
1. Lengua de textos académicos (científicos)
2. Lengua de textos literarios.
3. Lengua de programas y paquetes cibernéticos.
4. Lengua usada formalmente en espacios académicos.

El proceso de normalización ha implicado la superación de problemas a través
de una serie de implementaciones técnicas. Las soluciones de problemas en el
proceso de normalización de estas lenguas han sido diversas y abiertas. Por
ejemplo:
1. Echaron mano de préstamos de lenguas románicas y germánicas más cercanas.
2. Elaboración de gramáticas y diccionarios generales monolingües y
bilingües, manuales de normalización.
3. Constitución de observatorios de neología en la prensa escrita, radio y
televisión.
4. La normalización tiene un carácter político y un criterio lingüístico.
5. La normalización es concebida desde un enfoque  multi e
interdisciplinaria, y no como una tarea específica del lingüista.

La normalización también abarcó el sector del comercio empresarial y
cotidiano como acceso a la cultura y economía generando puestos de trabajo
para los usuarios con el ascenso en prestigio social, cultural, político y
económico.






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