Estimados señores(as):

                  Nosotros, como familiares de víctimas de homicidio, nos 
unimos a todos los ciudadanos que han externado su molestia por la imagen de 
víctimas del terremoto presentada por el Diario La Extra el pasado 12 de enero. 
La publicación de cuerpos sin vida no aporta absolutamente nada constructivo a 
la noticias. Ni las víctimas, ni sus familiares se merecen ese trato tan 
inhumano, así de sencillo.

                  A estos medios de comunicación no se les puede permitir 
seguir llevando dolor e indiferencia a los hogares costarricenses. Pedimos una 
televisión y medios escritos al servicio de la Patria, medios de información 
que nos den la posibilidad de ser mejores costarricenses.

                  No omitimos manifestarles que como Asociación estamos 
luchando por el respeto a la imagen de la víctimas, a continuación les envío un 
extracto del documento que se entregó en agosto 2008 a la Defensoría de los 
Habitantes y Comisión de Seguridad Ciudadana por parte de nuestras familias. (y 
al día de hoy todo sigue igual)

                  También es hora que el Colegio de Periodistas y su comite de 
ética tomen medidas al respecto:
                   
                  La Revictimización como forma de violencia.

                  La revictimización es peor que la propia victimización. 
Revictimizar es más grave porque significa que, aún después del hecho 
revelante, la misma es  magnificada  con argumentos y creencias que en lugar de 
cortar el circuito de la violencia, lo legitiman.

                  Violencia de los medios de comunicación. Existe?

                  No se respetan los derechos de imagen de las víctimas en los 
medios de comunicación colectiva:
                  La muerte de un ser querido es  un dolor muy grande y 
profundo, difícil de describir por  los dolientes y difícil  de sentir  por 
aquellos que no lo han vivido en carne propia.   Más aún cuando la muerte se 
produce en circunstancias donde la  violencia (aquella que anda suelta por las 
calles) se ensaña  en contra de personas inocentes.  Jóvenes  con futuros 
promisorios que, lucharon y murieron  creyendo  en un futuro;  en un país que 
les brindara seguridad y  oportunidades  para  construir  y cumplir sus sueños. 
 Creyendo firmemente  en la  justicia social y las garantías de sus derechos 
como personas. 

                  Cuando la muerte toca las puertas de nuestros hogares de la 
manera tan absurda y violenta como nos sucedió,  nos llena de mucho dolor como 
padres, como hermanos, como hijos.  En Costa Rica   nuestras vidas no valen más 
que un celular,  un ipod o cualquier bien material.  Es una realidad que  
existe un problema estructural muy difícil de resolver de la noche a la mañana.

                  Muchos hemos sido víctimas de la violencia, negarlo es 
absurdo como las medidas que no han sido las más efectivas para combatir esta 
distorsión que  mata a muchos.

                  Ahora bien, utilizar el dolor producido por la perdida de un 
ser querido como herramienta publicitaria, es aberrante,  antinatural e 
inhumano.   Es una canallada muy propia de los  medios de comunicación masiva; 
que ya en muchas ocasiones nos han descrito el dolor y el sufrimiento, lo  han  
dibujado como instrumento para atraer  rating. 

                  Se  comercializa el sufrimiento de una madre, de un padre, de 
un hermano, ante las cámaras de televisión, ante las primeras páginas de los 
noticieros,  disfrazados  como los canales  del pueblo.  

                  Nos venden  la muerte como una mera medida  o ración diaria  
de  frialdad ante el dolor, el cual no es ajeno, sino muy familiar a todos los 
costarricenses. 

                  Descuartizar el dolor de una madre, saber sacarle provecho, 
cuando las lágrimas brotan ante el sufrimiento es morboso; tienen la osadía  de 
hacerse  los solidarios: te destrozo y luego te apoyo.

                  ¡Qué manera tan baja de hacer periodismo!, si a esa basura se 
le puede llamar periodismo, explotar hasta la morbosidad la desdicha que 
representa la pérdida de un ser amado. ¡Qué forma tan irresponsable e indecente 
de asumir la ética  profesional , de asumir su degenerada posición  de  
competencia en los medios. 

                  Nos preguntamos: ¿donde están los colegios profesionales y 
sus comités de ética?

                  La imparcialidad de estos vampiros del dolor  está supeditada 
y en concordancia con  la mal llamada competencia  por ser los primeros.  Sí, 
son los primeros, pero en dosificar a diario a través de la pantalla chica, 
prensa escrita y radio, su única arma:   la deshumanización.

                  Señores, ¿qué será más duro? , ¿ Pasar por la muerte violenta 
de nuestros hijos una sola  vez o pasar diariamente este espeluznante momento 
cada vez que  nos pasan por los noticiarios?.  A tanto ha llegado la decadencia 
de los valores que se  recrean los eventos trágicos  con  suspicacia y 
habilidades teatrales. 
                   
                  Para todos aquellos que desean demostrar su descontento con 
La Extra pueden entrar a la siguiente pagina www.firmameaqui.com y dejar su 
firma.
                   
                   
                  Roxana Rojas
                  Presidenta
                  Asociación para Familiares de víctimas de homicidio
                  Justicia y paz   ASOPAZ
                  Para mitigar el dolor

                 
           

           

                 

                 

                 
           

                 
                 
           

           
     

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