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RACISMO Y ESCLAVITUD EN EL IMPERIO ESPANOL En el año 1995 y en Sigüenza (Guadalajara) dos empresarios de la construcción, Rafael Llorente González y José Maria de Miguel Osorio contrataron por escrito como esclavo de su empresa, Construcciones y Reparaciones Llorente S.L., a un joven argelino en situación "ilegal" con la promesa de que ese era el camino para legalizar su situación en España. En el contrato se especificaba que "como esclavo podían disponer de él como tuvieran a bien, para la flagelación o los trabajos forzados, lo sodomía o para hacer la comida, teniendo bajo su jurisdicción la vida o la muerte del esclavo". No recibía salario y era obligado a ir desnudo por la casa. Cuando el joven argelino vió que no de le daban permiso de trabajo, abandonó la casa y por medio de una asociación de derechos humanos informó al fiscal jefe de todo lo ocurrido. En el juicio los acusados fueron absueltos del delito contra los derechos y seguridad de los trabajadores alegando la sentencia que se trataba de un "ilegal" sin esos derechos. Ahora, 5 años después, el Tribunal Supremo condena por ese delito a los dos esclavistas a... ¡una pena de dos meses de prisión y a 250.000 ptas de multa cada uno! No es extraño que la ola fascista de agresiones racistas y explotación esclavista de los trabajadores inmigrantes crezca y se extienda por todos los territorios del estado. Al acto incalificable de un contrato de esclavitud se une el escarnio del silencio oficial y la "broma" de las condenas. ¡Y qué crímenes y bestialidades están haciendo con los niños y las niñas y jóvenes que traen con engaños de América Latina, de Rusia y de Asia para alimentar la gran industria del sexo en el imperio español y en condiciones de esclavitud! Y luego se gargarizan con "la democracia" y el "estado de derecho". Pero ya sabemos lo que es la democracia burguesa, el derecho burgués y el estado de la burguesía. COMUNISTES de CATALUNYA 20 de julio del 2000 |
